Los Síntomas de un Desequilibrio en la Carga de Trabajo de un Equipo: Identificándolos según la NOM-035-STPS-2018
En las empresas, un ambiente laboral sano es fundamental para mantener el bienestar de los trabajadores y la productividad del negocio. La NOM-035-STPS-2018, emitida por la Secretaría del Trabajo y Previsión Social en México, establece los lineamientos para la identificación y prevención de factores de riesgo psicosocial en el lugar de trabajo. Uno de los factores más críticos es el desequilibrio en la carga de trabajo, el cual puede llevar a estrés, agotamiento y un bajo rendimiento organizacional.
Aquí analizamos algunos síntomas clave que indican que la carga de trabajo en tu equipo no está equilibrada y cómo esto puede afectar tanto a los colaboradores como a la empresa.
1. Las tareas son realizadas por un solo colaborador o por un pequeño grupo de ellos
Un desequilibrio evidente es cuando la mayoría de las tareas recaen en una o pocas personas del equipo, mientras que el resto tiene un volumen de trabajo menor. Esto no solo puede generar un desgaste excesivo en los colaboradores sobrecargados, sino que también genera descontento entre aquellos que perciben una distribución inequitativa de las responsabilidades. Además, afecta la colaboración, crea resentimientos y puede derivar en altas tasas de rotación.
2. Períodos de descanso desiguales entre los trabajadores
Cuando algunos empleados tienen tiempos de descanso considerablemente mayores que otros, se crea una percepción de favoritismo o trato injusto. Los empleados que tienen menos descansos pueden comenzar a sentirse agotados, lo que a su vez afecta su productividad y motivación. Además, esta desigualdad rompe la cohesión del equipo y crea un ambiente laboral tóxico.
3. Falta de procedimientos y/o herramientas de trabajo claramente establecidos
La ausencia de procedimientos claros y la falta de herramientas necesarias para llevar a cabo las tareas generan un trabajo reactivo y desorganizado. Los empleados se ven forzados a “improvisar”, lo que aumenta el nivel de estrés y reduce la eficiencia. Un entorno sin estructura clara contribuye a la percepción de descontrol y carga excesiva de trabajo.
4. Operaciones reactivas, sin tiempo para planificación
Si el equipo constantemente “apaga fuegos” y no tiene tiempo para planificar sus tareas, esto es una señal de un mal manejo de la carga de trabajo. La falta de planificación aumenta el riesgo de errores, genera sobrecarga en momentos críticos y disminuye la capacidad de los trabajadores para desempeñarse de manera óptima a largo plazo.
5. Ausencia de registro de tareas realizadas
No tener un seguimiento claro de las tareas realizadas por cada miembro del equipo es otro indicio de desequilibrio. Sin un registro adecuado, es difícil identificar quién está siendo sobrecargado y quién podría tener capacidad para asumir más responsabilidades. Esto también impide realizar ajustes necesarios y fomenta la percepción de que el trabajo no está siendo valorado.
6. Capacitación no relacionada con las tareas del trabajador
Cuando la capacitación no está alineada con las tareas que realiza el equipo, se desperdicia tiempo y recursos, además de generar frustración en los trabajadores. La capacitación inadecuada impide que los empleados adquieran las habilidades necesarias para cumplir con sus responsabilidades, lo que agrava la sensación de sobrecarga y disminuye la eficiencia.
7. Las actividades no están ponderadas por complejidad o esfuerzo necesario
Si todas las actividades son tratadas por igual sin tener en cuenta su complejidad o el esfuerzo necesario para realizarlas, se genera una sobrecarga en aquellos empleados que lidian con tareas más complejas. Este desequilibrio es uno de los factores principales del agotamiento, ya que algunos trabajadores se sienten injustamente sobrecargados mientras que otros no.
¿Cómo afecta a la empresa el desequilibrio en la carga de trabajo?
Un equipo con una carga de trabajo mal distribuida no solo impacta negativamente en la salud y bienestar de los trabajadores, sino que también afecta la eficiencia operativa, incrementa los errores, eleva los costos laborales por rotación y puede provocar la pérdida de clientes debido a la baja calidad del servicio o producto. Para las empresas, identificar y corregir estos síntomas es clave para mantener la productividad y garantizar un ambiente laboral saludable.
¿Cómo solucionar este problema?
Para evitar el desequilibrio en la carga de trabajo es importante:
- Implementar herramientas de gestión del trabajo que permitan distribuir las tareas de manera equitativa.
- Establecer procedimientos claros y capacitar adecuadamente al personal.
- Registrar y evaluar continuamente las tareas realizadas para ajustar la carga de trabajo de manera equitativa.
- Asignar actividades con base en la complejidad y esfuerzo necesario, no todas las tareas son iguales ni deben tratarse como tal.
- Fomentar la planificación proactiva, en lugar de responder reactivamente a los problemas.
La aplicación correcta de la NOM-035-STPS-2018 no solo busca prevenir riesgos psicosociales, sino también construir una organización más eficiente, con equipos de trabajo balanceados y saludables.
AUTOR: Eduardo Cortes Bacelis
Director y fundador de IntegrAiT
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